Con los Decretos Presidenciales del 10 de diciembre de 2012 y el del 26 de febrero de 2013, se pulveriza la bilateralidad de la relación laboral SEP-SNTE y deja sin defensa de ninguna índole, sin exclusión, a todos los trabajadores al servicio del Estado.
Algunos imaginaban que las reformas, especialmente la educativa, representaban tan sólo un reiterado anuncio de: ¡Ahí viene el lobo…! Y es que los Decretos Presidenciales no son discriminatorios puesto que dañan a los trabajadores y al pueblo por igual, a la vez que destruyen la Soberanía e Independencia nacional.
Los más sorprendidos fueron los Jefes de Enseñanza de la sección X del SNTE en el Distrito Federal. La comunicación que leían en uno de sus párrafos a la letra dice: “En virtud de que las funciones de apoyo técnico pedagógico al seno de todas las escuelas de educación secundaria vienen siendo desempeñadas por el cuerpo directivo de las mismas, de conformidad con las disposiciones aplicables, con lo que se ha venido garantizando su cumplimiento, manifiesto a usted que su función principal ha concluido; consecuentemente, el término de su designación. Es decir, la materia de trabajo para cuya atención fue designado como jefe de enseñanza concluyó.” “… a partir del 1° de julio de 2013, toda vez que con estos mismos efectos dicha plaza ha sido cancelada del presupuesto de servicios personales de la Administración de Servicios Educativos en el Distrito Federal.”
El informe es que desaparece la Jefatura de Enseñanza de todas las especialidades sin importar la antigüedad, preparación, actualización o militancia sindical.
